domingo, 29 de enero de 2017

MUERTE DEL GIGANTE DE KANDAHAR - AFGANISTÁN


https://www.youtube.com/watch?v=5zWykUhK7do

 ESTE ES UN ARTICULO QUE LO AVALAN ESTOS INVESTIGADORES Y PERIODISTAS

L. A. MARZULLI , GEORGE NOORY, Y STEVE QUAYLE

Esconde el gobierno de estados unidos 'gigante de kandahar'?

Rompe el silencio un ex- miembro de las fuerzas armadas norteamericanas:
El testigo relata el encuentro con el mítico gigante de kandahar afganistán.

En la nueva entrega de “los vigilantes” se investiga la historia de un comando de las fuerzas especiales.

El investigador l, a, marzulli presenta un segmento de la entrevista con un ex- miembro de las fuerzas armadas norteamericanas
que estuvo presente en el mítico encuentro con el gigante de kandahar afganistán.


martes, 17 de enero de 2017

El Sistema ya ha reconocido la existencia de una raza perdida de Gigantes




El Sistema ya ha reconocido la existencia de una raza perdida de Gigantes Una de las mayores controversias relacionadas con las antiguas culturas prehistóricas de Norteamérica gira en torno a lo que llamamos los Tipos Físicos Únicos (TFU). Para el tema que trataremos a continuación, estos TFU son esqueletos de gigantescos humanoides, a menudo con cráneos hiper-elongados o extremadamente abombados, ocasionalmente denticiones de más o patológicas (incluyendo diversos informes sobre filas dobles o triples de dientes) y que, por lo general, son descubiertos en túmulos funerarios y cementerios relacionados con las culturas Adena-Hopewell, Civilizaciones Arcaicas, y el Complejo Ceremonial del Sudeste. En la actualidad resulta común observar cómo los investigadores de historia alternativa nos cuentan la historia del descubrimiento en masa de estos seres a lo largo de los siglos XIX y XX. Historiadores, anticuarios y arqueólogos han documentado el descubrimiento de Tipos Físicos Únicos por todos los Estados Unidos, con una concentración enorme hallada en las colinas y excavaciones del Valle del río Ohio y a lo largo del río Mississippi. Dichos datos pueden consultarse en las historias de cualquier condado, municipio o estado, así como en la literatura antropológica perteneciente a la Smithsonian Institution o ajena a ésta. He aquí varios ejemplos:

Kentucky «De un túmulo de la granja de Edin Burrowes, cerca de Franklin, fueron exhumados, en mayo de 1841, de una profundidad de más de 12 pies (unos 3,5 metros), varios esqueletos humanos. Uno de ellos, de dimensiones extraordinarias, fue encontrado entre lo que parecían haber sido dos troncos, cubierto con un tablón de madera. Muchos de los huesos estaban enteros. El mentón era demasiado grande como para encajar en la mandíbula, la carne o cualquier otra parte de un hombre común actual. Los fémures medían seis pulgadas (15 cm) más que los de cualquier hombre del Condado de Simpson. Los dientes, los brazos, las costillas y todo en general probaban que se trataba de un gigante de una antigua raza. (Historia de Kentucky, Lewis Collins)

Condado de Jo Daviess, Illinois «Los túmulos sobre los riscos han sido excavados casi por completo en los últimos dos o tres años…En todo lo que se ha abierto los operarios han encontrado una fosa en el centro, a aproximadamente dos pies y medio (unos 75 cm), bajo el nivel del suelo que, claramente, había sido excavada por la mano del hombre…Los huesos descubiertos en su interior revelan una raza de estatura gigantesca, con esqueletos enterrados en círculo en posición sedente alrededor de la fosa, con las piernas extendidas hacia el centro». (La Historia de Jo Daviess County)


«Cerca de la superficie original, a 10 o 12 pies (de 3 a 3.5 metros) del centro (del túmulo), sobre su parte inferior, recostado con cuidado sobre su espalda, estaba uno de los esqueletos más grandes descubiertos por los agentes de la Oficina, su estatura real tras realizar las mediciones pertinentes se demostró que tenía que ser de entre 7 y 8 pies ( 2 – 2,5 metros). Era todo fácilmente reconocible… » (12º Informe Anual de la oficina de Etnología)

Valle de Kanawha, Virginia Occidental «El nº 11 mide de 35 a 40 pies (10.5 a 12 metros) en su base y unos 4 pies de alto (1.25 metros). En el centro, 3 pies (90 cm) por debajo de la superficie, hay una bóveda de 8 pies (2.5 metros) de largo por 3 pies (90 cm) de ancho. Sobre el suelo de esta bóveda, entre los fragmentos descompuestos de las cortezas de árbol que los envolvían, fueron descubiertos un esqueleto completo con una estatura de 7 pies (2.15 metros), apoyado cuidadosamente sobre su espalda y con la cabeza orientada hacia el oeste… A diecinueve pies (5.75 metros) de la parte más alta…entre los restos de un ataúd de corteza, otro esqueleto, cuya estatura era de 7.5 pies (2.30 metros) y que medía 19 pulgadas (50 cm) de hombro a hombro». (12º Informe anual de la Oficina de Etnología)

«En el interior del pueblo de Brownstown, diez millas por encima de Charleston y justo por debajo del nacimiento del Lens Creek, existe otro antiguo lugar de enterramiento similar…En Brownstown, no hace mucho, dos esqueletos fueron hallados juntos, uno medía aproximadamente siete pies (2.15 metros) de altura y el otro, perteneciente a un enano deforme unos cuatro pies (1.20 metros)». (Historia del Gran Valle Kanawha)



Florida «Continuando con mis investigaciones, y excavando más lejos, hacia la cara sureste de la colina, descubrí por casualidad el hacha más grande de piedra que jamás había visto y que se haya encontrado nunca en esta parte del país. Muy cerca se hallaba el cráneo más grande y más perfecto del túmulo… Junto a esta calavera encontré el fémur derecho, la tibia, el húmero, y parte del radio, con una porción de la pelvis justo debajo del cráneo… Esperando un espécimen perfecto poseedor de este cráneo, estaba condenado a la decepción puesto que, tras desenterrarlo y colocarlo de modo que yo pudiera ver el rostro sin carne de este salvaje gigantesco, en el espacio de dos horas se desmenuzó y se hizo pedazos, quedando sólo pequeños fragmentos. Según la medida de sus huesos, su altura debió de ser de unos 7 pies (2.15 metros)». (Informe anual del Comité de Regentes del Smithsonian)




 Boceto digital de un antiguo gigante de Florida. Imagen cortesía de Marcia K. Moore, Ciamar Studio. Louisiana

«En la misma línea de anormalidad giró el hallazgo de un cráneo cuya dentición alcanzó el insólito número de cuarenta dientes, debido a la existencia de ocho incisivos adicionales… La naturaleza de la calavera descubierta en el túmulo de Larto, si la comparamos con las halladas en otras localidades, es sumamente anómala… Las anomalías en este caso no pueden ser atribuidas a una desfiguración artificial, puesto que de ser así, su desarrollo simétrico en relación con otras partes del cráneo hubiera sido imposible… Su impresionante aspecto no pudo haber sido el resultado del uso de vendas ni de otras aplicaciones externas, sino que tuvo que ser, indudablemente, congénito».

Túmulos de Etowah «La tumba A, un sepulcro de piedra con 2.5 pies (75 cm) de ancho, 8 pies (2.5 metros) de largo y 2 pies (60 cm) de profundidad, fue construida colocando losas de esteatita de canto sobre sus paredes y añadiendo otras a través de la abertura superior. El suelo era simplemente tierra endurecida por el fuego. Dicha tumba contenía los restos de un solo esqueleto, tumbado sobre su espalda y orientado hacia el este. El conjunto resultaba pesado y delimitaba un espacio de unos 7 pies (2.15 metros) de largo». (12º Informe Anual de la Oficina de Etnología)
 Estos ejemplos representan algunos de los rasgos anómalos de los Tipos Físicos Únicos descubiertos durante los siglos XIX y XX. Espacial y culturalmente, ilustran la extensa gama temporal y geográfica de estos tipos. Los constructores de túmulos del Valle Kanawha dejaron sus restos esparcidos en un área en la que se han encontrado diversos tipos de túmulos junto a los restos de la más antigua cerámica Fayette Thick de la Cultura Adena hallada hasta ahora. Recientemente se ha sugerido que algunos yacimientos de Virginia Occidental podrían adelantar de forma «aceptable» el inicio del Periodo Silvícola Temprano hasta los años 1400-1300 a. C.

 Las muestras de Illinois proceden de una región en la que se han descubierto muchos túmulos de la Era Arcaica, a menudo con túmulos de la Cultura Hopewell construidos sobre ellos o en su interior cientos o miles de años más tarde, como en el caso del Túmulo 1 de Elizabeth y el Túmulo 7 de Peter Klunk. El Túmulo Etowah (Túmulo C) se atribuye a la Cultura Mississippiana, datada entre los años 950 y 1450 de nuestra era.


Antiguos túmulos y monumentos del Valle del Mississippi. Original publicado por Guillermo Cullen Bryant y Sydney Howard Gay, “A Popular History of the United States”, Vol I (1888), p. 24. Antiguos túmulos y monumentos del Valle del Mississippi. Original publicado por Guillermo Cullen Bryant y Sydney Howard Gay, “A Popular History of the United States”, Vol I (1888), p. 24.

Después de que el Gobierno y los filántropos se hicieran cargo de la arqueología Americana, en la década de 1900, el sistema emprendió la política de negar, rotundamente, la existencia de dichos restos anómalos. El verdadero punto de partida para esta tendencia revisionista en el Museo Nacional se remonta a una fecha tan temprana como 1851, cuando E G Squier ya trabajaba para desacreditar las teorías de posibles contactos precolombinos. Varias décadas más tarde, Gerald Fowke intentaría desacreditar y desechar el trabajo de prácticamente todos los investigadores de campo hasta su llegada, incluyendo las mediciones de esqueletos tomadas por los agentes de la Oficina de Etnología. Sin embargo, la verdadera negación de los Tipos Únicos se hizo realidad durante el «reinado» de Ales Hrdlicka como Conservador de Antropología del Smithsonian (alrededor del año 1903).
["Ales Hrdlicka" autor desconocido - Archivo del Museo de Ales Hrdlicka en Humpolec. ] “Ales Hrdlicka” autor desconocido – Archivo del Museo de Ales Hrdlicka en Humpolec. Hrdlicka parece que se aficionó a menospreciar, constantemente, la idea de que hubieran sido descubiertos alguna vez esqueletos anómalos. Así explicaba tanto en sus trabajos académicos como en comparecencias públicas:

Y el esqueleto ‘gigantesco’ ‘y de ocho pies’ es a día de hoy casi un estereotipo para muchos, relacionado con un informe elaborado por algún aficionado con respecto al hallazgo de restos óseos en Florida, así como en otras partes del país. Todos estos informes…y lo digo de una vez por todas, son exageraciones.”
 
El doctor Hrdlicka achaca a la ‘voluntad de creer’ de los antropólogos aficionados las informaciones sobre algunos ‘descubrimientos’ que llegaban hasta la oficina con frecuencia… los pretendidos ‘hallazgos’ describen una raza de antiguos gigantes de entre 7 y 8 pies (de 2,15 a 2,5 metros) de alto con huesos y mandíbulas bastante más grandes que los actuales… Junto a los «gigantes», observa el Dr. Hrdlicka, a menudo aparecen restos igualmente fantasiosos de «enanos».

De manera interesante, el nombre de Hrdlicka aparece en numerosos informes sobre descubrimientos de esqueletos gigantescos durante el ejercicio de su cargo en el Museo americano:
 Los esqueletos de estos Aborígenes americanos hasta hoy desconocidos mostraron tras las mediciones pertinentes que su estatura estaba comprendida entre los seis pies y medio y los siete pies (de 2 a 2,15 metros)…Excavando en las soleadas dunas de arena de las Golden Isles, Georgia, los arqueólogos han sacado a la luz la extraña prueba de una raza prehistórica asombrosa, de tamaño gigante…¿Qué hombres eran éstos, miembros de una tribu cuya estatura media iba de los seis pies y medio a los siete pies? Algunos de los primeros cráneos desenterrados por Preston Holder ya han sido examinados en el Instituto Smithsonian por el Doctor Ales Hrdlicka, máxima autoridad en Tipos Humanos Norteamericanos.”

En la actualidad existen ya una buena cantidad de libros, DVDs y, al menos, un programa de televisión, que documentan las proezas de los cazadores modernos que se hallan «tras la pista» de tan extraños restos, insistiendo en que, si al menos uno de estos esqueletos pudiera ser encontrado y presentado «a los expertos», de alguna manera se podría alterar el paradigma defendido por el sistema. Sin embargo, tal y como explicaremos en la segunda parte de este artículo, «los expertos» ya han redescubierto, fotografiado y medido restos de este tipo.

Artículo traducido de ancient-origins.net – Autores: Jason Jarrell y Sarah Farmer

Fuentes:  History of Kentucky, Volume 2. Lewis Collins, 1878. Aparecen gigantes en el texto en las páginas 107, 653, 654, 666, 683, and 722

https://archive.org/stream/collinshistoricav02coll#page/n7/mode/2up The History of Joe Daviess County, Illinois, 1878. Ver página 843

https://archive.org/stream/historyofjodavie00kett#page/844/mode/2up/search/Ancient+Mounds 12th Annual Report of the Bureau of Ethnology, 1891.

https://archive.org/stream/annualreportofbu1218901891smit#page/n7/mode/2up History of the Great Kanawha Valley, porJohn P Hale, 1891. Ver página 47.

https://archive.org/stream/historyofgreatka01madi#page/n7/mode/2up Annual Report of the Boards of Regents of the Smithsonian, 1874. Ver Antiwuities of Florida, página 392. Publications of the Louisiana Historical Society 1896. Mounds of Louisiana, Part 1. A partir de la página 20.

https://archive.org/stream/publicationslou02socigoog#page/n143/mode/2up Building Woodland Archaeological Units in The Kanawha River Basin, West Virginia, por Patrick D Trader, en Woodland Period Systematics in The Middle Ohio Valley, editado por Darlene Applegate y Robert Mainford, 2005.
Para el Túmulo Elizabeth número 1, ver The Archaic and Woodland Cemeteries of the Elizabeth Site in the Lower Illinois Valley editado por Leigh and Buikstra, 1988.

Para el Túmulo Peter Klunk número 7 , ver Hopewell and Woodland Site Archaeology in Illinois, Boletín 6 del Illinois Archaeological Survey https://uofi.app.box.com/s/gw2ah1c1wyi602w27umt


lunes, 16 de enero de 2017

Existió una raza de «Gigantes Blancos» según antiguas tribus de América






De acuerdo con numerosos escritos y leyendas orales de las tribus nativas norteamericanas, una raza de «Gigantes Blancos» existía en el pasado distante. Curiosamente, relatos similares de gigantes existentes en la Tierra en el pasado remoto se pueden encontrar en todo el mundo. Existen numerosas leyendas entre varias tribus nativas americanas, a partir de los comanches en el norte a otras tribus en el sur, que hablan de una misteriosa raza de gigantes de piel blanca que habitaban Norteamérica miles de años atrás, desapareciendo misteriosamente de la faz del planeta. En su libro «History of the Choctaw Indians, Chickasaw and Natchez» (“Historia de los indios Choctaw, Chickasaw y Natchez”) (1899), Horacio Bardwell Cushman escribió: «La tradición de los Choctaws. Una raza de gigantes que una vez habitó el ahora estado de Tennessee, y con los que sus antepasados tuvieron que luchar cuando llegaron a Mississippi en su migración desde el oeste. La tradición afirma que los individuos de la raza de gigantes, conocida como los Nahullo, poseían una estatura impresionante. (Fuente) https://www.amazon.com/History-Choctaw-Chickasaw-Natchez-Indians/dp/0806131276


Cushman señaló que, con el tiempo, el término «Nahullo» se hizo común para referirse a todas las personas de raza blanca, pero en un principio, el término se utilizaba para designar una raza de gigantes de piel blanca con los que combatieron los Choctaws después de cruzar el río Mississippi. Hay mucha evidencia que sugiere que hoy en día seres gigantes, de hecho, caminaron sobre la Tierra.

Comanche Curiosamente, de acuerdo a un relato del año 1857, el jefe Rolling Thunder de los Comanche dijo: «Hace innumerables lunas, una raza de hombres blancos, de 10 pies de altura, y mucho más ricos y poderosos que ninguna persona blanca que viva ahora, habitaron una gran parte del país, que se extiende desde la salida hasta la puesta del sol. Sus fortificaciones coronaban las cumbres de las montañas, protegiendo sus ciudades situadas en los valles intermedios. Superaron a todas las demás naciones, en todo tipo de artesanías. Eran individuos astutos, y valientes guerreros que gobernaron sobre la tierra que habían arrebatado a sus antiguos propietarios. Los rostros pálidos de la actualidad serían como pigmeos si se los comparara con los gigantes, tanto en su arte y en sus brazos.»





«Era una raza valiente, altiva y guerrera, para la cual los hombres blancos de hoy en día serían solo pigmeos». «Era una raza valiente, altiva y guerrera, para la cual los hombres blancos de hoy en día serían solo pigmeos». Según el jefe Comanche, un gran espíritu acabó con los gigantes de piel blanca cuando se les olvidó todo sobre la justicia y la misericordia, llegando a ser demasiado orgullosos.

Navajo Los Navajo son otra tribu antigua que ofrece evidencia de Gigantes caminando en la Tierra. Los Navajo hablan igualmente de unos gigantes blancos llamados «el pueblo de Starnake», describiéndolos como «una raza de gigantes blancos dotados de tecnología minera que dominaban el oeste, esclavizando a las tribus menores y que tenían fortalezas a lo largo de las Américas. Finalmente se extinguieron o ‘regresaron a los cielos’». Los misteriosos Starnake se extinguieron o «regresaron a los cielos». La denominación Starnake puede referirse a la raza bíblica conocida como los Anakim (Núm. 13:33, Deut. 1:28). El nombre de Og (en hebreo “jefe”) parece ser característico (ver Zimmerman, pp. 188-91). El alfabeto ogham se atribuye a este fundador cultural. (Fuente) http://paulyhart.blogspot.com.es/2012/12/giants-lived-in-americas.html


Otras innumerables historias de gigantes blancos se pueden encontrar en relatos de diversas antiguas tribus norteamericanas. Los Choctaw también mencionaron a los misteriosos gigantes. De acuerdo con la tribu Choctaw, que se ubicaba en lo que ahora se conoce como Tennesee, una raza de gigantes dominó la tierra en el pasado distante. Se dice que sus antepasados lucharon contra ellos cuando llegaron a Mississippi durante su migración hacia el oeste.

Paiutes Curiosamente los Paiutes tienen leyendas orales que hablan de gigantes de pelo rojo, descritos como blancos caníbales que tenían aproximadamente 10 pies de altura (coincidiendo con la descripción de los Comanche) que habitaron en la cueva Lovelock, en Nevada. Curiosamente, en el pasado, los arqueólogos han descubierto restos de personas con pelo rojo en la región. Los habitantes del antiguo territorio de México igualmente mencionan en sus leyendas aztecas la existencia de una raza de gigantes.

Aztecas En la mitología azteca, estos gigantes se conocen como los Quinametzin. http://codigooculto.com/2015/09/humanoides-gigantes-documentados-en-registros-aztecas/#axzz48AvG9N1O
 El jefe de los Gigantes fue, según algunas versiones del mito, el dios Tláloc. Curiosamente, se cree que los Quinametzin fueron los constructores de la ciudad de Teotihuacan y Tlachihualtepetl. Los «tlaxcaltecas» relataban que, cerca de la época de la conquista española, ellos mismos habían luchado con el último Quinametzin en la Tierra.


Un grupo de nativos de las montañas del centro de México capturan y asesinan un gigante. Crédito: Códice Ríos. Un grupo de nativos de las montañas del centro de México capturan y asesinan un gigante. Crédito: Códice Ríos. Si viajamos a América del Sur, nos encontraremos con que en el antiguo pueblo de Manta de Perú, hablaban de una raza de gigantes que en el pasado distante, coexistieron con ellos. Su leyenda dice que: «Llegaron de la costa, en botes hechos de cañas, tan grandes como buques de gran tamaño, un grupo de hombres de un tamaño tal que, desde la rodilla hacia abajo, su altura era tan grande como toda la altura de un hombre ordinario. Sus extremidades estaban todas en proporción con el tamaño deformado de sus cuerpos, y fue una cosa monstruosa el ver sus cabezas, con el pelo que les llegaba hasta los hombros. Sus ojos eran tan grandes como platos pequeños.»
Existió una raza de «Gigantes Blancos» según antiguas tribus de América Existió una raza de «Gigantes Blancos» según antiguas tribus de América De acuerdo con numerosos escritos y leyendas orales de las tribus nativas norteamericanas, una raza de «Gigantes Blancos» existía en el pasado distante. Curiosamente, relatos similares de gigantes existentes en la Tierra en el pasado remoto se pueden encontrar en todo el mundo. Existen numerosas leyendas entre varias tribus nativas americanas, a partir de los comanches en el norte a otras tribus en el sur, que hablan de una misteriosa raza de gigantes de piel blanca que habitaban Norteamérica miles de años atrás, desapareciendo misteriosamente de la faz del planeta. En su libro «History of the Choctaw Indians, Chickasaw and Natchez» (“Historia de los indios Choctaw, Chickasaw y Natchez”) (1899), Horacio Bardwell Cushman escribió: «La tradición de los Choctaws. Una raza de gigantes que una vez habitó el ahora estado de Tennessee, y con los que sus antepasados tuvieron que luchar cuando llegaron a Mississippi en su migración desde el oeste. La tradición afirma que los individuos de la raza de gigantes, conocida como los Nahullo, poseían una estatura impresionante. (Fuente) Cushman señaló que, con el tiempo, el término «Nahullo» se hizo común para referirse a todas las personas de raza blanca, pero en un principio, el término se utilizaba para designar una raza de gigantes de piel blanca con los que combatieron los Choctaws después de cruzar el río Mississippi. Hay mucha evidencia que sugiere que hoy en día seres gigantes, de hecho, caminaron sobre la Tierra. Comanche Curiosamente, de acuerdo a un relato del año 1857, el jefe Rolling Thunder de los Comanche dijo: «Hace innumerables lunas, una raza de hombres blancos, de 10 pies de altura, y mucho más ricos y poderosos que ninguna persona blanca que viva ahora, habitaron una gran parte del país, que se extiende desde la salida hasta la puesta del sol. Sus fortificaciones coronaban las cumbres de las montañas, protegiendo sus ciudades situadas en los valles intermedios. Superaron a todas las demás naciones, en todo tipo de artesanías. Eran individuos astutos, y valientes guerreros que gobernaron sobre la tierra que habían arrebatado a sus antiguos propietarios. Los rostros pálidos de la actualidad serían como pigmeos si se los comparara con los gigantes, tanto en su arte y en sus brazos.» (Fuente) «Era una raza valiente, altiva y guerrera, para la cual los hombres blancos de hoy en día serían solo pigmeos». «Era una raza valiente, altiva y guerrera, para la cual los hombres blancos de hoy en día serían solo pigmeos». Según el jefe Comanche, un gran espíritu acabó con los gigantes de piel blanca cuando se les olvidó todo sobre la justicia y la misericordia, llegando a ser demasiado orgullosos. Navajo Los Navajo son otra tribu antigua que ofrece evidencia de Gigantes caminando en la Tierra. Los Navajo hablan igualmente de unos gigantes blancos llamados «el pueblo de Starnake», describiéndolos como «una raza de gigantes blancos dotados de tecnología minera que dominaban el oeste, esclavizando a las tribus menores y que tenían fortalezas a lo largo de las Américas. Finalmente se extinguieron o ‘regresaron a los cielos’». Los misteriosos Starnake se extinguieron o «regresaron a los cielos». La denominación Starnake puede referirse a la raza bíblica conocida como los Anakim (Núm. 13:33, Deut. 1:28). El nombre de Og (en hebreo “jefe”) parece ser característico (ver Zimmerman, pp. 188-91). El alfabeto ogham se atribuye a este fundador cultural. (Fuente) Otras innumerables historias de gigantes blancos se pueden encontrar en relatos de diversas antiguas tribus norteamericanas. Los Choctaw también mencionaron a los misteriosos gigantes. De acuerdo con la tribu Choctaw, que se ubicaba en lo que ahora se conoce como Tennesee, una raza de gigantes dominó la tierra en el pasado distante. Se dice que sus antepasados lucharon contra ellos cuando llegaron a Mississippi durante su migración hacia el oeste. Paiutes Curiosamente los Paiutes tienen leyendas orales que hablan de gigantes de pelo rojo, descritos como blancos caníbales que tenían aproximadamente 10 pies de altura (coincidiendo con la descripción de los Comanche) que habitaron en la cueva Lovelock, en Nevada. Curiosamente, en el pasado, los arqueólogos han descubierto restos de personas con pelo rojo en la región. Los habitantes del antiguo territorio de México igualmente mencionan en sus leyendas aztecas la existencia de una raza de gigantes. Aztecas En la mitología azteca, estos gigantes se conocen como los Quinametzin. El jefe de los Gigantes fue, según algunas versiones del mito, el dios Tláloc. Curiosamente, se cree que los Quinametzin fueron los constructores de la ciudad de Teotihuacan y Tlachihualtepetl. Los «tlaxcaltecas» relaban que, cerca de la época de la conquista española, ellos mismos habían luchado con el último Quinametzin en la Tierra. Un grupo de nativos de las montañas del centro de México capturan y asesinan un gigante. Crédito: Códice Ríos. Un grupo de nativos de las montañas del centro de México capturan y asesinan un gigante. Crédito: Códice Ríos. Si viajamos a América del Sur, nos encontraremos con que en el antiguo pueblo de Manta de Perú, hablaban de una raza de gigantes que en el pasado distante, coexistieron con ellos. Su leyenda dice que: «Llegaron de la costa, en botes hechos de cañas, tan grandes como buques de gran tamaño, un grupo de hombres de un tamaño tal que, desde la rodilla hacia abajo, su altura era tan grande como toda la altura de un hombre ordinario. Sus extremidades estaban todas en proporción con el tamaño deformado de sus cuerpos, y fue una cosa monstruosa el ver sus cabezas, con el pelo que les llegaba hasta los hombros. Sus ojos eran tan grandes como platos pequeños.» (Fuente)

Artículo publicado en CodigoOculto.com: Existió una raza de «Gigantes Blancos» según antiguas tribus de América http://codigooculto.com/2016/05/existio-una-raza-de-gigantes-blancos-segun-antiguas-tribus-de-america/