jueves, 30 de octubre de 2014

EL COMPLOT DE LOS GIGANTES

Por Enrique de Vicente.

Por inverosímil que nos parezca una conspiración de semejante envergadura, no sería sino una prolongación de aquella donde nos hace vivir inmersos en un continuo engaño ese Sistema anónimo pero real, dirigido por una pequeña élite todopoderosa que remonta sus raíces a tiempos más remotos. Pero necesitamos apremiantemente acercarnos a la verdad. Porque, según la tradición universal, en un futuro podría ocurrir algo similar a la degeneración sufrida por los gigantes con los ejemplares de nuestra especie, cuando ésta sea sustituida en la cúspide de la escala evolutiva por una nueva humanidad «más que humana». Tal vez es esa posibilidad lo que más nos aterra cuando nos negamos a tomar en serio que los gigantes poseyeron la Tierra, la devastaron enloquecidamente, fueron exterminados por catástrofes naturales y nuestros ancestros acabaron con sus supervivientes. Nos queda el gran consuelo de saber que fueron también gigantes, que se convirtieron en los grandes héroes luchando contra la degeneración, quienes pusieron las bases de nuestra civilización. 

LOS GIGANTES QUE HABITARON LA TIERRA


Miles de tradiciones, huesos, tumbas y construcciones ciclópeas en todo el planeta atestiguan su existencia


Por Enrique de Vicente
Cientos de antiguos mitos, leyendas y tradiciones aseguran que todo nuestro planeta estuvo poblado por gigantes, algunos de los cuales sobrevivieron aislados hasta épocas muy recientes o se «cruzaron» con humanos. Lo importante es que, pese a proceder de todo el mundo y de épocas muy distantes, coinciden en las descripciones que hacen de sus rasgos físicos, su comportamiento y las causas de su desaparición. Y en todas partes se les atribuye un mismo tipo de construcciones ciclópeas, megalíticas y piramidales, cerca de las cuales se han hallado cientos de huesos, calaveras y tumbas de tamaño descomunal, que han sido ocultadas o menospreciadas por el Sistema establecido, como parte fundamental de la historia prohibida.

Recientemente, el portal de noticias ruso RT popularizó en todo el mundo un vídeo en el que se hablaba sobre el supuesto descubrimiento, divulgado en 2012 por dos residentes en Ecuador, Bruce Fenton y Daniella Cárdenas, de lo que creen podría ser la «ciudad perdida de los gigantes», a la que se refieren leyendas locales. Estaría situada dentro del Parque Nacional de los montes Llanganates, al norte de la ciudad Baños de Agua Santa, en una zona significativamente conocida como la Puerta del Dorado y situada al sur de Quito.

La única pared visible en ése y otros vídeos aparece parcialmente cubierta por la vegetación, muy abundante en esa zona. Formaría parte de lo que parece una estructura de tronco piramidal, de 80 m de anchura y otros tantos de altura. Al menos esa parte visible de su superficie aparece recubierta por enormes bloques irregulares, con 1,50 por 0,80 metros de promedio. En opinión de un geólogo que las observó, no serían de piedra tallada, sino de un tipo de arcilla compactada que nos recuerda a algunos relatos referentes a un antiquísimo procedimiento secreto, que permitiría deshacer piedras para luego solidificarlas en el lugar y con la forma deseada; un método que requeriría una mezcla de hierbas –según un sacerdote a quien revelaron el secreto– y que parece similar al procedimiento utilizado por los iniciados egipcios para elaborar los gigantescos bloques de sus construcciones, según la hipótesis del científico Joseph Davidovits, inventor de la química de los polímeros.

Se asegura que en torno a esa supuesta pirámide se han hallado diversas piezas de cerámica y herramientas de piedra tallada, algunas de las cuales tienen un tamaño tan enorme que no podrían ser usadas más que por gigantes. Y Fenton sospecha que podría formar parte de una «ciudad» integrada por otras pirámides similares, pues asegura haber identificado varias colinas cercanas de igual tamaño al de aquella cuyas paredes comienzan ahora a ser despejadas y filmadas.

En realidad, ya se había hablado públicamente hace más de un año del hallazgo de los restos visibles de la supuesta ciudad –a la que no es muy difícil acceder con ayuda de un buen conocedor de la zona– y las primeras referencias a la misma datan de hace una década. Aunque no ha sido hasta ahora cuando, tras el interés despertado por RT, algunas televisiones ecuatorianas han desplazado sus equipos al lugar y ha estallado una pequeña polémica.

ESQUELETO CON SIETE METROS DE ALTURA
Pero, más allá de esa polémica, lo cierto es que los descubrimientos relacionados con gigantes, especialmente hallados en cuevas, en ésa y otras zonas de Ecuador, se remontarían muy atrás. En 1964, el padre Carlos Miguel Vaca se hizo con una colección de huesos encontrados en una zona montañosa, perteneciente al Sr. Luis Guamán y próxima a Changaiminas, pequeña localidad de la que Vaca era párroco y cuyo nombre significa «cementerio de dioses», situada en la provincia de Loja, al sur de Ecuador y cerca de la frontera con Perú. Cuando el cura intentó reconstruir muchas de esas piezas, que posteriormente organizó y mostró a los visitantes en un pequeño museo, descubrió que pertenecían a una hembra humanoide gigantesca.

jueves, 2 de octubre de 2014

La verdad sobre los esqueletos gigantes de los montículos indígenas de América del Norte



Durante los últimos años ha surgido una gran controversia acusando al Instituto Smithsoniano (y a un grupo de escépticos y arqueólogos) por encubrir el descubrimiento de cientos de esqueletos gigantes encontrados en los montículos indígenas de los nativo americanos. Jin Vieira es uno de los pioneros en dar a conocer cientos historias sobre esqueletos gigantes luego que se interesara en el tema al visitar varias cámaras de piedra en el norte de EE.UU. Hasta la fecha, Vieira ha recolectado cerca de 1,500 artículos de periódicos y libros publicados entre el siglo 19 y principios del siglo 20. En los registros está escrito que los esqueletos tienen un tamaño que va desde los 2 hasta más de 5 metros de altura.
Una de las plataformas de los montículos en Etowah, Georgia, EE.UU. Un reporte del Smithsoniano de 1887 revela el hallazgo de 7 esqueletos gigantes enterrados allí. Una de las plataformas de los montículos en Etowah, Georgia, EE.UU. Un reporte del Smithsoniano de 1887 revela el hallazgo de 7 esqueletos gigantes enterrados allí. Vieira comenzó a publicar los artículos, uno a la vez, cada día en su página de Facebook llamada Your Daily Giant. Subsecuentemente, tras varias publicaciones con buena acogida, los escépticos blogueros no se hicieron esperar. Uno de los detractores, Jason Colavito, proclamó que los reportes publicados eran malas interpretaciones de huesos de mastodonte o mamut o bien meras falsificaciones. El escéptico también argumentó que la paleopatología moderna podía explicar algunos de los reportes debido a que el repetido congelamiento y descongelamiento de huesos enterrados era «suficiente para convertir un cuerpo promedio en uno gigante». Ambas aseveraciones de Colavito serán refutadas con creces en las siguientes líneas. En febrero de 2014, Andrew Collins y yo comenzamos una investigación detallada de los numerosos reportes de gigantes. Visitamos multitud de sitios con montículos, hablamos con varios arqueólogos, y rastreamos muchas de las historias de esqueletos gigantes hasta su fuente. Lo que encontramos es tan intrigante y tiene un alcance tal que decidí escribir un libro intitulado: «Ruta de Almas: El Viaje de la Muerte Nativo Americano; Cygnus, Orión, la Vía Láctea, Esqueletos Gigantes en Montículos, & el Smithsoniano». El título refleja nuestro propósito original, i.e., detallar la nueva información acerca de los misteriosos símbolos hallados en los artefactos desenterrados en montículos y lo que significan de acuerdo a las creencias sobre la muerte de los nativo americanos, además de indagar hasta su origen las historias sobre «esqueletos gigantes». En este artículo, nos centraremos solo en los descubrimientos de osamentas. 

  Tapa del libro (disponible en Amazon). Tapa del libro (disponible en Amazon). Tumbas de Gigantes … A diferencia de lo que dicen los escépticos, encontramos algunos fraudes en los reportes y detallamos algunos importantes en el libro. El más llamativo de ellos fue el de «Los Gigantes de Florida, Tampa», reportado en los periódicos entre 1922 y 1927. También encontramos que otros reportes simplemente se fueron desvaneciendo en el olvido. Esto último implica que eran historias obtenidas típicamente de segunda o tercera mano donde alguien le contaba a alguien que en cierta excavación se habían desenterrado esqueletos de generosas proporciones. Las pistas para este tipo de publicaciones siempre terminaban donde habían empezado, lo que usualmente significa una historia compilada gracias a las remembranzas de los residentes locales.  

Un esqueleto fotografiado antes de ser enterrado nuevamente, en Moundville, Alabama, 1987. Este no era un «gigante». Un esqueleto fotografiado antes de ser enterrado nuevamente, en Moundville, Alabama, 1987. Este no era un «gigante». También notamos que muchos sitios de Internet y algunos libros que tocan irresponsablemente el tema de los esqueletos gigantes, agregan oraciones y «hechos» a la fuente original. Muchos supuestos hallazgos de esqueletos «gigantes» publicados en la red no están correctamente rotulados. Por ejemplo, fotografías de un presunto esqueleto gigante excavado en Serpent Mound, no pertenece a ese montículo y el «gigante» es una imagen de un esqueleto normal desenterrado en Chillicothe. Otras tantas historias eran enigmáticas y sus caminos llevaban a múltiples fuentes, pero, a fines prácticos, no representaban ninguna prueba que se pudiera considerar contundente. No obstante, el hecho es que una proporción substancial de los viejos reportes de esqueletos gigantes fueron escritos fácticamente y con evidencia arqueológica que los respalda. Uno se da cuenta que ciertos arqueólogos modernos y algunos detractores de sillón detestan este último hecho de tal manera que aborrecen a cualquiera que se atreva a tomarse el tema en serio.

Artículo publicado en MysteryPlanet.com.ar: La verdad sobre los esqueletos gigantes de los montículos indígenas de América del Norte
http://mysteryplanet.com.ar/site/la-verdad-sobre-los-esqueletos-gigantes-de-los-monticulos-indigenas-de-america-del-norte/